El barniz es un compuesto resinoso que se aplica esencialmente en la madera. Su principal función es protegerla y realzar su belleza.
Los barnices y aceites preservan la madera y prolongan su durabilidad. Los insectos, los hongos, la radiación solar y la humedad son los peores enemigos de la madera. Además, ofrecen resistencia física y química, por ejemplo contra productos abrasivos de limpieza.
La otra función principal de los barnices es el acabado decorativo ya que admiten tintes y colorantes que logran cambios de tono y color o efectos determinados como brillo, semibrillo o mate. Además, facilita su limpieza.